Asunción – Paraguay.- Ronaldinho no ha perdido la alegría que lo caracteriza por estar en prisión. En el centro de reclusión en Paraguay, donde espera decisión de un juez por haber entrado al país con un pasaporte falsificado es el ídolo de los privados de libertad.
Acostumbrado a brillar en los mejores campos del mundo, el astro brasileño ha llevado todo su talento a la pequeña cancha de la cárcel donde constantemente juega con otros reclusos.
Desde el 5 de marzo el ícono del fútbol mundial y su hermano Roberto de Assis Moreira están encarcelados de manera preventiva mientras avanzan las investigaciones tras arribar a Asunción con unos pasaportes paraguayos auténticos pero con datos falsos.
Sus allegados contaron a ESPN que Ronaldinho no está desanimado en prisión. Trata de llevar su estancia de la mejor manera.
Los reclusos le piden autógrafos y comparten con él. Además asiste a un taller de carpintería donde busca despejar la mente.
Blas Vera, el director de la cárcel, asegura que Ronaldinho y su hermano gozan de ciertos beneficios como aire acondicionado y televisión en su celda. El baño sí lo comparten con todos los internos.
Con su madre, Doña Miguelina, habla casi todas las noches.
Amigos de Ronaldinho dijeron a ESPN que al exjugador del Barcelona seguro le hace la falta la música, una de sus grandes pasiones.
