Salt Lake City – EEUU.- Aunque pertenecen al mismo partido, el gobernador de Utah, Gary Herbet, parece ir en una dirección distinta a la del presidente Donald Trump. A través de una carta, el mandatario local se dirigió al jefe de Estado para manifestarle su deseo de recibir, en suelo utaheño, a un mayor número de refugiados.
La misiva, redactada y enviada a finales de octubre, fue la reacción de Herbet a la orden ejecutiva que emitió la Casa Blanca, con la intención de permitirle, a las 50 entidades que conforman la geografía estadounidense, vetar los reasentamientos de inmigrantes, que han llegado a Estados Unidos como refugiados.
“Empatizamos profundamente con las personas y los grupos que se han visto obligados a abandonar sus hogares y nos encanta darles un nuevo hogar y una nueva vida”, expresó el gobernador. Del mismo modo, Gary Herbert, dejó claro que, en Utah, un estado conservador y mayoritariamente blanco, creen que los migrantes se han convertido en “empleados productivos y ciudadanos responsables”.
