La Paz – Bolivia.- El pasado jueves dio inicio en Bolivia la auditoría vinculante realizada a las elecciones presidenciales del 20 de octubre por un equipo técnico de la Organización de los Estados Americanos (OEA). En menos de 48 horas de la instalación, uno de los miembros del equipo, identificado como Arturo Espinosa, renunció a sus funciones.
“He decidido retirarme de la auditoría para no comprometer su imparcialidad. Debí informar a la OEA sobre manifestaciones públicas previas acerca de proceso electoral en Bolivia”, dijo Espinosa sin dejar claro el contexto de sus palabras.
Al inicio del proceso de auditoría, Arturo Espinosa junto al canciller de Bolivia, Diego Pary, aseguró que entregarían “en tiempo y forma el informe” requerido por la OEA.
La OEA en su cuenta en Twitter difundió el mensaje presentado por Espinosa en la misma red social. Hasta el momento no se conocen mayores detalles sobre la renuncia, ni si la misma guarda relación con alguna irregularidad en el proceso electoral captada por los auditores.
La renuncia de Espinosa ocurre en momentos de mucha tensión pública en Bolivia por denuncias de fraude electoral. Las protestas que mantienen paralizado el país ya han dejado al menos dos muertos.
