California – Estados Unidos.- Raúl Alcocer Chávez , es un joven inmigrante de 24 años de edad, con discapacidad auditiva que fue detenido el pasado 22 de mayo por autoridades migratorias y hoy se encuentra en el Centro de Detención de Adelanto, condenado a vivir su prisión aislado y siendo discriminado.
Raúl tiene discapacidad para hablar y escuchar, por lo que luego de su detención debió llevado a un centro con condiciones especiales, lamentablemente para la historia de vida del joven inmigrante esto no sucedió, pues en el centro de Adelanto no existen herramientas que le permitan comunicarse con el resto de los inmigrantes detenidos ni tampoco con sus familiares.
“Me siento tan solo porque no me puedo comunicar. No tengo acceso al teléfono. Siento que valgo menos que las otras personas. Esta situación me ha hecho llorar”, manifestó Raúl a través de un intérprete.
El equipo de defensores de inmigrante, encabezado por la abogada en migración, Mercedes Victoria Castillo, manifiestan que la detención de Raúl fue traumática desde un primer momento, pues los oficiales del Servicio de Migración y Aduanas (ICE) no le creían que era sordo y lo agredieron arrojándolo al piso.
“Lo están tratando muy mal, no le dan acceso a teléfono de video. Los guardias le hacen burla. No le dan los servicios básicos. Se siente muy solo como si estuviera confinado en solitario porque no se puede comunicar con nadie, no puede llamar a su familia”, manifestó la defensora.
El joven de 24 años, nació en México y con tan solo siete meses de nacido llegó junto a sus padres al sur de California. La detención en su contra se registró por haber fallado de manera involuntaria a una corte de migración.
“Se confundió con las fechas. Lo que pasa es que depende de otras personas para que le interpreten sus documentos”, puntualizó Castillo.
La familia de Raúl, conformada por su madre, hermanos y esposa también tiene discapacidad auditiva, se comunican a través del Lenguaje Americano de Señas (ASL) que se emplea entre las comunidades con discapacidad auditiva en los Estados Unidos.
“Cuando faltó a la corte de migración el 25 de marzo, le salió una orden de deportación por no asistir a la cita. Y el 22 de mayo fue arrestado”
Más allá de haber fallado a una corte de manera involuntaria, el caso de Raúl y su permanencia segura en Estados Unidos, se comenzó a complicar en 2016 cuando fue acusado y detenido por violencia doméstica y pagó una fianza para ser liberado.
“La violencia doméstica honestamente no sé cómo pasó. La esposa y él alegaron. La hermana llamó a la policía. Pero no sé cómo estuvo de acalorada la discusión para que lo hayan detenido”, expuso la abogada.
Raúl también tiene otro delito menor en su contra por negarse a ser arrestado.
“Le pidieron que se pusiera de rodillas al momento del arresto. Como no lo hizo, le dieron ese cargo. Pero todo es parte de lo mismo, su discapacidad auditiva le impide cumplir con órdenes”, dice la abogada.
La abogada Victoria Castillo, fue designada por el Consulado de México en San Bernardino para asistir legalmente a Raúl.
“Si los del Consulado de México no me hubieran mandado a apoyarlo, ya lo habrían deportado. El 22 de julio, conseguí meter una moción para reabrir su caso en la corte, se aprobó y él va a tener la oportunidad de pelearlo. Lamentablemente el juez le negó la primera fianza para salir libre y estamos atorados ahí”, dice.
La abogada considera que la discapacidad auditiva de Raúl hace que el caso sea más difícil al momento de ayudarlo. “Es muy difícil ayudarlo. Cada vez que voy tengo que llevar a un intérprete quien debe ser investigado y aprobado por el Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE)”.
