Nueva York – Estados Unidos.- Este martes se confirmó que una hacker accedió a la base de datos del banco estadounidense Capital One y consiguió robar la información personal de aproximadamente 100 millones de clientes, entre titulares y solicitantes de tarjetas de crédito.
El robó de información se registró en el mes de marzo y se conoció luego del arresto de una mujer en el área metropolitana de Seattle (Washington) por parte del FBI, acusada de fraude bancario tras publicarlo en sus redes.
Capital One, que también opera en Canadá, donde seis millones de cuentas quedaron expuestas, explicó que una hacker accedió a su red robando la información personal, sin embargo aseguraron que dicho robo no representa ningún peligro económico para las victimas, pues la pirata informática no obtuvo lo números de tarjetas de créditos ni las credenciales necesarias para poder conectarse a las cuentas.
Los datos obtenidos ilícitamente incluyen nombres, direcciones, números de teléfono, direcciones de correo electrónico, fechas de nacimiento e ingresos. En algunos casos también robó el número de identificación fiscal, el historial de pago, números de cuentas bancarias y el saldo.
La hacker, identificada como Paige Thompson, de 33 años de edad, trabajó como ingeniera para Amazon Web Services y para realizar su fechoría aprovechó una vulnerabilidad en el servidor de Capital One.
La entidad financiera ha anunciado que ya fue solventado el problema de vulnerabilidad en el sistema de gestión de datos. El arreglo del servidor tiene un impacto financiero de hasta 150 millones de dólares, por los cambios en los protocolos de seguridad para evitar un caso similar, las notificaciones a los clientes expuestos al fallo y los costes legales.
Se trata de uno de los incidentes más graves de este tipo y se conoce pocos días después de que el servicio de solvencia crediticia Equifax fuera sancionado con 700 millones de dólares por dejar al descubierto los datos privados de casi 150 millones de clientes.