Pekin – China. La Asamblea Nacional de China (ANP) aprobó hoy, una nueva ley de inversión extranjera, que acoge algunas de las demandas de Estados Unidos y de Europa a fin de hallar un equilibrio entre las empresas extranjeras y nacionales.
A fin de intentar poner término a la guerra comercial entre Washington y Pekín, la nueva ley se aprobó a través del reconocimiento de las exigencias foráneas, de mayor apertura económica.
«China tratará a todo el mundo por igual: empresas extranjeras y nacionales, privadas y públicas», declaró el primer ministro Li Keqiang en rueda de prensa, transmitida en vivo por un medio estatal.