Monterrey.- En un vibrante encuentro, el Pachuca se coronó campeón del torneo Clausura 2016 al empatar a un gol con los Rayados en el Estadio BBVA y llevarse así el global por 2-1. El gol de Pachuca fue obra de Víctor Guzmán, mientras que el de los locales lo anotó Dorlan Pabón.
Si bien el gol era el invitado obligado en el Estadio BBVA si los Rayados pretendían luchar por el campeonato, pocos imaginaron la aplanadora futbolera con la que salieron los dirigidos por Antonio Mohamed al terreno de juego. Desde el primer minuto los locales se fueron al frente de una manera impresionante. Dorlan Pabón, Edwin Cardona, Rogelio Funes Mori y compañía no dieron tregua a la portería defendida por el experimentado Óscar Pérez.
Los locales no se cansaron de proponer, pero para su mala suerte el ‘Conejo’ tampoco se rindió al ahogar el grito de gol a las 53,500 almas presentes en el majestuoso inmueble regio. Por arriba, por abajo, a mano cambiada, volando o manteniendo la posición, Pérez atajó a diestra y siniestra todo lo que pudo hasta que la presión desbordó al talentoso guardameta.
Un anonadado Pachuca esperó demasiado atrás a un conjunto albiazul que con la necesidad y la motivación de su gente no paró de atacar, hecho que dio frutos cuando al minuto 39 el colombiano Pabón rompió el cerrojo tuzo y abrió el camino hacia lo que fue un partido de altas emociones.
El primer tiempo le salió muy barato a la visita que se fue a los vestuarios con un escaso 1-0 en contra después de sufrir con al menos cuatro ocasiones claras de gol. ¿Misión del Pachuca en el medio tiempo? intentar nivelar en algo las acciones para la segunda mitad.
Diego Alonso y sus dirigidos hicieron lo que se pudo en un extenso descanso que se alargó por poco más de 20 minutos, sin embargo la conexión que vivieron los elementos rayados esta noche fue poderosa y en pocos minutos tomaron el control de la acciones nuevamente.
El dominio de los de casa continuó y la verticalidad fue un sello a lo largo de la segunda mitad, sin embargo la zaga del Pachuca pareciera haber apretado piezas, por lo que pudieron contener de una mejor manera a los regiomontanos.
En la recta final del partido se dio una descolgada de Pabón que pudo ser letal a favor de los Rayados, sin embargo Aquivaldo Mosquera se sacrificó por su equipo y bajó al delantero albiazul en la posición de último hombre, hecho que le costó la tarjeta roja, misma que terminó siendo salvadora si tomamos en cuenta el desenlace del partido.
De manera increíble y en contra de todos los libretos, Víctor Guzmán silenció a los presentes en la cancha de los Rayados y es que luego de una buena jugada anotó de cabeza el gol del triunfo, el que le dio un título más al Pachuca, el tercero que ganan en tierras regias.