Maryland-EEUU.- Un inmigrante salvadoreño lleva 10 años ayudando a las personas más necesitadas de su comunidad en Silver Spring, Maryand, pero la crisis generada por la pandemia COVID-19 logró que la bendición llegara a más familias.
El “superhéroe” de carne y hueso es conocido como Rufino Fuentes, quién en compañía de su familia y compañeros de la iglesia cristiana a la cual asiste, se encarga de organizar alimentos para 400 núcleos familiares de la ciudad.
Fuentes explica que recibe donaciones de productos alimenticios de tres organizaciones, ellos se encargan de distribuir estos productos y entregarlos a los necesitados cada semana.
“Trabajamos tres veces por semana, domingo, martes y sábado. Se les entrega a personas que debido a la pandemia, no cuentan con recursos económicos”, dijo Fuentes.
Rufino asegura que cuando ve una sonrisa en el rostro de los beneficiados, se inspira para seguir trabajando en esa iniciativa.
El salvadoreño afirma que seguirá con esa labor hasta que Dios se lo permita.