Washington – Estados Unidos.- La pandemia de coronavirus también es letal en el plano económico. La semana pasada las solicitudes de beneficios por desempleo en Estados Unidos alcanzaron un nuevo récord: 6,6 millones.
La cifra pulveriza la anterior marca que justo ocurrió la semana anterior cuando hubo 3,3 millones de solicitudes, según los datos del Departamento del Trabajo.
Estas solicitudes reflejan el ritmo de despidos en el país, lo que se traduce en casi 10 millones de personas que perdieron sus puestos de trabajo en las últimas dos semanas.
Analistas estiman que los despidos podrían llegar a 20 millones para finales de abril y la tasa de desempleo subir a 15%, superando ampliamente el récord de 10,8% establecido durante la recesión de 1982.
Muchas empresas han recortado nómina para tratar de mantenerse a flote en momentos en que la pandemia ha paralizado casi toda la actividad económica.
El Congreso aprobó un rescate económico de 2,2 billones de dólares, el cual prevé ayuda financiera directa para los ciudadanos en este momento de emergencia.
Mark Zandi, economista jefe de Moody’s Analytics, dijo sólo el 6% de las empresas encuestadas por Moody’s está contratando más personal, lo que representa un descenso del 40% en las semanas previas al brote de coronavirus.
Generalmente a las personas que reciben ayuda gubernamental por desempleo se les alienta a buscar un nuevo trabajo, pero en el plan aprobado por el Congreso esta condición fue excluida debido a que casi dos tercios de la población tienen orden de mantenerse en casa para evitar una mayor propagación del COVID-19