Londres – Inglaterra.- Más de 600 mil turistas quedaron atrapados en sus destinos vacacionales tras el anuncio de la bancarrota de turoperador británico Thomas Cook, el segundo más importante del mundo.
La información se hizo oficial la madrugada de este lunes tras infructuosas negociaciones entre su principal accionista y los acreedores, para que el grupo Thomas Cook consiguiera 227 millones de libras para el pago de deudas.
El nerviosismo se apoderó de inmediato de sus clientes que gozan de la última etapa de vacaciones de verano. La incertidumbre sobre qué pasará con el resto de los días de disfrute de los paquetes turísticos y con el retorno a sus países de origen generó congestión en los aeropuertos en busca de información.
«Todas las reservas del grupo Thomas Cook, incluyendo los vuelos y las vacaciones, han sido canceladas», dijo la Autoridad de Aviación Civil.
El ente regulador anunció en un comunicado que inició de inmediato un plan para repatriar a 150 mil británicos atrapados en otros países, en lo que será la mayor operación de este tipo en el país desde la Segunda Guerra Mundial.
Sin embargo, miles de viajeros deberán volver por sus propios medios y esperar reembolso de los pasajes
La quiebra es «motivo de un gran pesar», expresó Peter Fankhauser, director ejecutivo de Thomas Cook, quien se disculpó con los «millones de clientes y los miles de empleados» a los que va a afectar la nueva situación.
El turoperador Thomas Cook emplea a unas 22.000 personas -9.000 de ellas en el Reino Unido.
