Guatemala.- César Calderón, uno de los abogados del expresidente de Guatemala Otto Pérez Molina, dijo hoy que su cliente está «estable» pero que permanece internado en un centro privado para su recuperación después de sufrir un problema cardíaco la noche del martes.
En una conversación telefónica con Efe, el abogado detalló que el exmandatario, en prisión preventiva desde septiembre de 2015 por varios casos de corrupción, tuvo un «problema cardíaco» lo que provocó que su aparato desfibrilador tuviera que efectuar cuatro descargas para reanimación, de las seis con las que dispone el equipo.
Es por ello que Pérez Molina está internado «en recuperación» hasta que su corazón encuentre «su nivel normal»; la próxima semana los médicos cambiarán el desfibrilador, solo la batería o bien el aparato completo.
«Tuvo varias arritmias malignas el martes, las que provocaron que se disparara el aparato reanimador con el que cuenta hasta en cuatro ocasiones«, detalló Calderón, aunque agregó que está «estable» y «consciente», rodeado de su núcleo familiar cercano, que lo ha acompañado en todo momento.
El exmandatario, recluido en una cárcel que funciona dentro de la Brigada Militar de Mariscal Zavala, (ubicada en la periferia de la capital), recibió el martes un golpe con un balón en el pecho mientras hacía deporte y se empezó a sentir mal, por lo que requirió asistencia médica.
El doctor de turno de la cárcel ordenó su traslado al Hospital Roosevelt, uno de los centros públicos más grande de la capital, pero en la madrugada fue conducido al Centro Médico Militar (privado) por orden de un juez.
Pérez Molina, presidente de Guatemala entre 2012 y 2015, estuvo ingresado en el Centro Médico Militar más de dos meses debido a padecimientos cardiacos pero el pasado 31 de julio el juez que lleva sus procesos, Miguel Ángel Gálvez, ordenó su reingresó en prisión, ya que los informes señalaban que podía seguir ahí con atención médica básica.
El abogado defensor César Calderón declaró que no se oponía a la decisión judicial, pero advertía de que se mantendrá el riesgo para su cliente quién padece de fibrilación ventricular maligna.
Este miércoles recordó a Efe que seguirán insistiendo con la prisión domiciliar para el expresidente y más teniendo en cuenta los últimos hechos, pero agregó que hay esperar a que se fije una audiencia.
Pérez Molina está acusado de ser uno de los cabecillas de la trama de corrupción denominada «La Línea», una red dedicada a la defraudación aduanera desarticulada en abril del 2015 por el Ministerio Público y la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (Cicig).
Además de ese caso, está acusado en otros dos procesos más de corrupción conocidos como «Cooptación del Estado» y «TCQ«, pero ninguna de las tres causas ha llegado aún a juicio.
