Tokio – Japón.- El aplazamiento de los Juegos Olímpicos de Tokio para el próximo año tiene a un grupo de beneficiados: los atletas suspendidos por dopaje cuya sanción culmina en 2020.
“Las sanciones son cronológicas y no para eventos específicos”, explicó el Comité Olímpico Internacional (COI) basado en la reglamentación de la Agencia Mundial Antidopaje.
El COI ha intentado en varias ocasiones introducir reglas que excluirían a los deportistas condenados por dopaje de los Juegos Olímpicos posteriores, pero el Tribunal de Arbitraje Deportivo no la ha permitido.
La realización de los juegos de Tokio 2020 estaba previstos para julio y agosto pero fue pospuesta para los mismos meses de 2021 debido a la pandemia de coronavirus COVID-19.
El Comité Olímpico anunció también que está trabajando con la Agencia Internacional de Análisis Antidopaje para hacer más rigurosa la detección de casos de abuso de sustancias prohibidas por parte de los atletas.
Ambos entes están evaluando el lanzamiento de un nuevo programa de control previo a los Juegos.
“El tiempo extra que tenemos antes del inicio de los Juegos supone una oportunidad para probar y validar nuevos métodos de detección”, dijo el COI en un comunicado colgado en su sitio web.
El Comité Olímpico indicó que las muestras tomadas durante las pruebas previas a los juegos se almacenarán durante 10 años y que tan pronto como estén disponibles los métodos de prueba mejorados, estas muestras puedan volver a analizarse.
