Pensilvania – Estados Unidos.- Una segunda campaña presidencial, mucho mejor financiada que la primera e incluso más organizada, es la que se encuentra realizando Donald Trump de cara a las elecciones presidenciales de 2020, en las que busca su reelección.
Hasta el momento, la campaña ha demostrado que Trump se ha trazado nuevos objetivos para ganar votos, en sus actos por cada rincón de Estados Unidos se evidencia su intención por simpatizarle a los hispanos, incluso en pequeños lugares donde no hay grandes comunidades de latinos, como Pensilvania.
Trump intenta ganar todos aquellos votos que ayuden a definir a su favor una posible batalla ajustada.
“Creo que se ganan las campañas con lo que llamamos ‘tajaditos’. Bocaditos. Hay que hacer un poco de esto y un poco de aquello. No necesitas a todo el mundo de todos los grupos, pero tienes que tener un poquito de todo”, dijo la cubana Bertica Cabrera Morris, miembro del grupo asesor “Latinos for Trump”.
Pese a la intención de Trump de guiñarle el ojo a los hispanos durante la campaña electoral, ganar sus votos le será bastante difícil, pues la hostilidad y las decisiones de Trump sobre los inmigrantes, es una gran tranca que existe en contra del mandatario en el juego electoral.
Los demócratas, por el contrario, si cuentan con los hispanos indignados por las medidas y los comentarios de Trump contra los inmigrantes. Los expertos en campañas electorales, aseguran que los hispano que se encuentran autorizados para votar en Estados Unidos, acudirán en masa a las urnas muy posiblemente con la única intención de impedir un segundo mandato de Trump, pues sus compatriotas se han visto afectados por las políticas implementadas.
Por su parte, los activistas en la campaña de Trump han reconocido que el fervor del presidente contra los hispanos no ayuda a su causa, pero aseguran que “muchos miembros de la comunidad se verán atraídos por la fortaleza de la economía y los valores conservadores”.
La segunda campaña de Trump, ha centrado sus esfuerzos en estados indecisos como Florida y Nevada, y refuerza la posición de Trump en Arizona y Texas, sin embargo, a pequeños lugares donde la población latina va en alta, también es importarte acceder.
“Los latinos están saliendo de los centros urbanos, apartándose de los feudos demócratas. Pensilvania es un ejemplo perfecto, nos estamos centrando de forma específica en esas zonas que pueden ser exitosas para nosotros”, dijo José Fuentes, exsecretario de Justicia de Puerto Rico y asesor de la campaña de reelección del presidente.