Ciudad de Guatemala – Guatemala.- El Gobierno de Guatemala decretó estado de excepción en cinco departamentos del país. La medida, que entró en vigor este miércoles y que tendrá una duración de 30 días, fue asumida luego del asesinato de tres soldados en El Estor, una municipalidad que pertenece al estado de Izabal, al noreste de la República guatemalteca.
Según la versión oficial, los efectivos fueron dados de baja por campesinos que estarían vinculados a bandas de narcotraficantes. Los militares formaban parte de una patrulla que intentaba dar con el paradero de una aeronave que estaba cargada de droga y que se estrelló, luego de no poder aterrizar en una pista clandestina.
Para justificar su decisión, el presidente Jimmy Morales argumentó que la muerte de los soldados “pone en riesgo la libertad, la justicia, la seguridad, la vida y la paz de las personas”. También aseguró que “hay poblaciones que ponen a mujeres y niños como barricadas humanas para que las fuerzas de seguridad no puedan llegar hasta las pistas (de aterrizaje) clandestinas”.
La declaratoria del estado de sitio faculta al primer mandatario para asumir todos los poderes en las localidades comprometidas. También suspende derechos fundamentales como el de manifestación o reunión. También quedan sin efecto los permisos concedidos a civiles para portar armamentos.
Por esas razones, Jordán Rodas, procurador de los Derechos Humanos de Guatemala, ha dicho esperar “que el estado de sitio no sea un pretexto para abusar del poder”. “Lamentablemente, el Estado solo tiene presencia en las comunidades rurales con su cara represiva, cuando ha sido incapaz de brindar educación, salud vivienda o nutrición”, señaló el funcionario.
