Washington.- El gobierno de Donald Trump se plantea eliminar un programa que otorga autorización de empleo (EAD, por su sigla en inglés) a ciertos cónyuges H-4 dependientes de profesionales extranjeros con una visa H-1B.
Esto es como parte de su política enfocada en darle prioridad a los trabajadores estadounidenses, según reportan medios como el San Francisco Chronicle.
Creada por Obama
Creado por el expresidente Barack Obama en la acción ejecutiva del 20 de noviembre de 2014, el beneficio permite que el cónyuge H-4, una vez tenga aprobado el trámite de residencia, gestione y reciba un permiso de trabajo.
“Entre la aprobación del trámite de residencia y la recepción de la ‘green card’, solían pasar entre 12 y 18 meses”, explicó José Guerrero, un abogado de inmigración que ejerce en Miami, Florida. “El programa ha ayudado a miles de inmigrantes a obtener su autorización de empleo para comenzar a trabajar legalmente en el país.
La visa de no inmigrante H-1B es utilizada para trabajadores profesionales extranjeros.
Cada año el gobierno otorga una cuota de 65,000 visas, más otras 20,000 destinadas a extranjeros graduados de universidades estadounidenses.
Durante el año fiscal 2016 (1 de octubre del 2015 al 30 de septiembre de 2016), la Oficina de Ciudadanía y Servicios de Inmigración (USCIS) otorgó 41,526 permisos de trabajo a inmigrantes H-4 cónyuges de portadores de visa H-1B.
En el año fiscal 2017, en cambio, la agencia aprobó 36,366 autorizaciones de empleo (EAD).
Los posibles daños
“Si cancelan el programa, esto no debería afectar la petición de residencia”, precisó Guerrero. “El permiso de trabajo anticipado era un beneficio extra mientras aguardaban la ‘green card’”.
La autorización de empleo para ciertos cónyuges dependientes de no inmigrantes H-1B puede ser solicitada siempre y cuando el portador de la visa para profesionales extranjeros tenga aprobado el formulario I-140.
Para el abogado de inmigración Ezequiel Hernández, quien ejerce en Phoenix Arizona, “si la Casa Blanca cancela este programa afectaría a quienes están en espera de la residencia y esperando una fecha de prioridad para recibir la tarjeta verde”.
Agregó que no cree que la eliminación de este beneficio afecte “el grueso del programa, pero muchas compañías podrían perder temporalmente a ciertos empleados profesionales extranjeros, quienes opten por no necesariamente esperar en Estados Unidos que les llegue la residencia legal permanente”.
Por qué el programa
El objetivo del programa, que entró en vigor el 26 de mayo de 2015, “formó parte de las acciones ejecutivas sobre inmigración que el presidente Obama anunció en noviembre de 2014”, explica la USCIS en su web.
“La regla de las visas H-4 tiene el propósito de ayudar a alcanzar los objetivos de atraer y retener a trabajadores extranjeros altamente cualificados, y reducir al mínimo la interrupción en las empresas estadounidenses como resultado de no inmigrantes H-1B que optaron por no permanecer en Estados Unidos y aspirar al estatus de residente legal permanente (LPR, por su sigla en inglés)”, agrega la agencia.
El programa, sin embargo, fue puesto en duda el 18 de abril cuando el presidente Donald Trump firmó la orden ejecutiva ‘ Compre productos estadounidenses y contrate estadouisdenses’.
Crear sueldos y tazas de empleo
El decreto, ha dicho la Casa Blanca, tiene como objetivo crear sueldos y tasas de empleo más altos para los trabajadores estadounidenses, y proteger sus intereses económicos por medio del cumplimiento y la administración rigurosa de las leyes de inmigración.
La orden ejecutiva de Trump pretende controlar la asignación de las visas H-1B, pero no su proceso.
«Vamos a revisar la contratación de estadounidenses para proteger los puestos de trabajo», dijo Trump en tono de campaña durante un evento en Kenosha, Wisconsin.
«Vamos a comenzar una reforma de las visas H-1B. Ahora mismo las visas H-1B son concedidas en una lotería totalmente aleatoria y eso está mal.
En su lugar, deberían ser dadas a los solicitantes más preparados y mejor pagados, y nunca deberían ser usadas para reemplazar a estadounidenses», advirtió.
El texto de la orden establece como política «aplicar rigurosamente las leyes que rigen la entrada a los Estados Unidos de trabajadores extranjeros».
No necesita detallar si se refiere solamente a aquellos que reciben visas H-1B o si también incluye al proceso para la certificación laboral.
Siendo este un requisito clave que deben cumplir las empresas que contratan a trabajadores extranjeros. Estos documentos son otorgados por el Departamento de Trabajo.
En su orden ejecutiva, Trump establece que «tan pronto como sea posible» los secretarios de Estado, Trabajo y Seguridad Nacional, y el fiscal general deben entregar un informe.
Esa debe contener sus recomendaciones para mejorar el programa de entrega de visas H-1B.