La Paz – Bolivia.- Tras la salida de Evo Morales y la instalación de un nuevo Ejecutivo, Bolivia ha roto relaciones con la dictadura de Nicolás Maduro. En consecuencia, la nación andina declarará como persona “non grata” a Cris González, actual embajadora del régimen madurista en suelo boliviano.
Ambas decisiones fueron anunciadas, este viernes, por Karen Longaric, ministra de Relaciones Exteriores del gobierno que encabeza la recién investida presidenta, Jeanine Áñez.
Al comunicar las medidas, la Canciller agregó que Bolivia suspenderá su participación en la Unión de Naciones Suramericana (Unasur) y en la Alianza Bolivariana para los Pueblos de América (ALBA).
“El bloque ya no opera, ya no existe y no sirve”, expresó Longaric, a la hora de referirse a la Unasur.
Del mismo modo, la nueva jefa de la diplomacia boliviana notificó que los embajadores designados por el ex presidente Morales serán removidos de sus cargos, pues trabajaban como “operadores políticos”. Sólo permanecerán en sus puestos el embajador en Perú y el representante ante la Santa Sede.
