Daniela Vargas, una inmigrante argentina que fue detenida en Mississippi tras denunciar las deportaciones de su padre y de su hermano, será deportada sin que tenga una audiencia frente a un juez de inmigración, según dijo este jueves su abogada Abby Peterson al diario local Jackson Free Press.
Vargas, de 22 años, fue detenida el miércoles cuando salía de una rueda de prensa frente a la alcaldía de Jackson, en la que varios líderes y activistas denunciaban las nuevas políticas migratorias del presidente Trump. La dreamer había permitido que caducara su permiso del programa de Acción Diferida para Llegados en la Infancia (DACA), que le protegía temporalmente de la deportación. Aunque había solicitado la renovación del permiso, esta solicitud pendiente no le concedía estatus legal en el país, según explicó a Univision Noticias uno de los abogados involucrados en el caso.
Este jueves se supo que a Vargas no se le concederá fianza ni una audiencia en la corte porque su familia entró al país a través de un programa de exención de visa, que permite a inmigrantes de ciertos países ingresar al país por un periodo de hasta 90 días sin una visa. Según la ley, beneficiarios de este programa no pueden revisar o apelar cualquier acción de deportación a menos que soliciten asilo a base de un miedo creíble. «(Los agentes de inmigración) no tienen planes de darle una audiencia frente a un juez de inmigración y ella será preparada para ser deportada, así que prepararán sus documentos de viaje y un plan de vuelo», le dijo la abogada Peterson al diario local Free Press.
Agentes de ICE confirmaron el miércoles que la detención de Vargas había sido una «acción específica de cumplimiento» y no parte de una redada.
Jordan Sanders, la amiga que iba manejando el auto cuando Vargas fue detenida, había dicho entonces a Univision Noticias que sospechaba que los agentes habían ido a buscar a Vargas específicamente cuando fue a hablar en la alcaldía. «Fue como si supieran quiénes éramos y nos estuvieran buscando», dijo.
