Baton Rouge – EEUU.- Un inmigrante que permanecía bajo la custodia del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) se quitó la vida este martes. El sujeto, identificado como Roylán Hernández Díaz, de 43 años, se suicidó dentro de su celda, ubicada en la Correccional Richwood, de Luisiana, al sureste de Estados Unidos.
Familiares aseguraron que Hernández Díaz, quien permanecía en un área de aislamiento conocida como “el pozo”, temía ser deportado. El indocumentado, que llegó a Estados Unidos procedente de Cuba, en mayo de este año, había comparecido ante una corte de inmigración. Ese tribunal le había fijado una segunda audiencia, que sería desarrollada en otro juzgado.
A través de un comunicado, el ICE señaló que “la causa preliminar de la muerte parece ser el estrangulamiento autoinflingido”. La agencia agregó que el suicidio fue notificado a “la Oficina Oficina del Inspector General del Departamento de Seguridad Nacional y la Oficina de ICE de Responsabilidad profesional”.
Compañeros de celda del inmigrante comentaron a la prensa que el cubano había iniciado una huelga de hambre, con la finalidad de llamar la atención y visibilizar las precarias condiciones en las que son mantenidos, dentro de la Correccional. “Los tratan mal y las autoridades no creen que sean perseguidos políticos”, expresó, en ese sentido, un familiar que habló en condición de anonimato.
