Londres.- Las acciones globales se hundían el lunes los precios del petróleo se desplomaban hasta un 33% después de que Arabia Saudita lanzó una guerra de precios con Rusia, lo que llevó a los inversores, ya conmocionados por el COVID-19, a buscar refugio en los bonos gubernamentales y el yen.
Riad golpeó a los mercados tras indicar que planea aumentar su producción significativamente tras el colapso del acuerdo de recorte de bombeo de la OPEP con Rusia, guerra por la participación que recuerda un pulso en 2014 que provocó un desplome cercano a los dos tercios en los precios del crudo.
Los futuros del referencial Brent cedían US$12 a US$33,20 el barril, mientras que el West Texas Intermediate bajaban US$11,80 a US$29,48 por barril, reseñó Reuters.
Las bolsas europeas sufrían grandes pérdidas en el inicio de la sesión. Londres se hundía más de un 8%, mientras que Fráncfort bajaba más de un 7%, con pérdidas en la misma línea en París.
El STOXX 600 se desplomó en territorio bajista, con descensos de más de 20% desde su últimos máximos. En el sector petrolero las acciones de Tullow se despeñaban un 57%, con declives de 27% para BP en el inicio de la jornada.
En Asia, las acciones y monedas de mercado emergente con exposición al petróleo se hundían en una sesión volátil, con avances para el yen. Se prevé que la ola de liquidaciones se verá en la apertura de Wall Street, con fuertes caídas en los futuros.
Los inversores llevaban el rendimiento de la deuda del Tesoro estadounidense a 30 años por debajo del 1% por suposiciones de que la Reserva Federal se verá obligara a bajar sus tasas de interés en al menos 75 puntos básicos en su reunión del 18 de marzo, tras haberlas bajado ya la semana pasada.
El índice amplio de MSCI de acciones de Asia-Pacífico fuera de Japón perdió un 4,4% en su peor día desde agosto de 2015, mientras que los papeles preferentes de Shanghái cedieron un 2,9%. El Nikkei de Japón cayó un 5,1%.
El número de personas infectadas con el coronavirus superó los 110.000 en todo el mundo mientras el brote llegaba a más países, causando más daño económico.