Georgia – Estados Unidos.- Durante la temporada de influenza que aún se vive en Estados Unidos, el país ha presentado un récord en muertes de niños, alcanzando hasta la fecha 105 fallecimientos por influenza. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EE.UU, han presentado la alarmante cifra y la han comparado con el número de muertes infantiles registradas por gripe durante cada temporada desde 2004, excluyendo claro está, la pandemia de gripe de 2009.
El doctor William Schaffner, especialista en enfermedades infecciosas del Centro Médico de la Universidad de Vanderbilt, manifestó que la actual temporada de gripe es “inusual” y se presenta con mayor proporción en niños y jóvenes.
“La prevalencia anterior de influenza B, una cepa de gripe que tiende a ser más común en los niños, podría ser una razón por la que más niños se vieron afectados”, dijo Schaffner. Resaltó también que medida que disminuyó el número de casos de influenza B, aumentó el número de casos de H1N1.
Por su parte, el doctor Buddy Creech, profesor asociado de enfermedades infecciosas pediátricas en el Centro Médico de la Universidad de Vanderbilt, manifestó que “Esta es la primera vez en 25 años en que la influenza B se volvió tan común tan temprano”.
Schaffner y Creech no conocen por qué el cronograma de influenza de este año ha sido tan diferente.
“Está dejando a todos los virólogos de la gripe desconcertados”, dijo Schaffner.
Los especialistas alertaron a los representantes de los pequeños a estar muy alerta a cada síntoma, pues han recordado que los síntomas de la influenza B son inesperados y no deben confundirse, se debe buscar atención médica de inmediato.
“A menudo, la influenza B tiene más probabilidades de causar síntomas gastrointestinales que la influenza A, aunque ambas pueden ocurrir en niños pequeños”, dijo Creech. “Algunos padres no reconocen estos síntomas como parte de la influenza … lo que puede retrasar el pensamiento de la influenza y retrasar el tratamiento”.
Los síntomas gastrointestinales, como los vómitos, también pueden afectar la capacidad de tomar antivirales que pueden acortar la duración de la gripe, recordó el doctor Creech.
