Pyongyang – Corea del Norte.- Este viernes fue confirmado por autoridades de Corea del Norte, que la prueba de un nuevo misil es una “solemne advertencia” al gobierno de Corea del Sur, aviso que envían debido al desarrollo de armas por parte de Surcorea y la intención de realizar ejercicios militares con Estados Unidos, consideran que esas maniobras son ensayos de una invasión y pruebas de la hostilidad en su contra por parte de estas naciones aliadas.
Tras la prueba del misil, el ejército de Corea del Sur manifestó que los datos de vuelo mostraban similitudes con el Iskander, un misil de corto alcance con capacidad nuclear y de fabricación rusa. Aseguraron que una versión norcoreana de ese misil podría afectar a toda Corea del Sur y a los soldados estadounidenses que allí se encuentran, pues sería extremadamente difícil de interceptar.
La prueba del misil se realizó justo cuando autoridades estadounidenses y norcoreanas intentan concertar conversaciones y parecieran dar impulso a las estancadas negociaciones nucleares.
Aunque Corea del Norte se refirió con rudeza a Corea del Sur, Pyongyang se abstuvo de recurrir a su discurso hostil contra Estados Unidos, una posible señal de que está interesado en mantener viva la diplomacia con el gobierno de Trump.
Tras las pruebas de misiles, Corea del Norte se siente contenta pues «debe haber causado suficiente preocupación y angustia a algunas fuerzas que eran el blanco, como fue la intención».