Un helicóptero que transportaba a siete personas, se estrelló en el Gran Cañón del Colorado el sábado.
Al menos tres personas perdieron la vida y las otras cuatro resultaron lesionadas.
Seis pasajeros y el piloto estaban a bordo del helicóptero Papillion Grand Canyon Helicopters, cuando se estrelló alrededor de las 5:20 p.m. del sábado, en Hualapai Nation, cerca del Quartermaster Canyon, dijo el jefe de la policía Francis Bradley.
Los cuatro que resultaron heridos tenían lesiones de nivel 1 y fueron tratados en el lugar.
El sitio web de la compañía dijo que vuela aproximadamente 600,000 pasajeros al año en Grand Canyon y otros tours. También señala que «cumple con las reglas y regulaciones de seguridad de vuelo, según las regulaciones requeridas por la Administración Federal de Aviación».
Un abogado de accidentes de helicóptero, Gary C. Robb, quien representó a una mujer gravemente quemada en un accidente mortal de Papillion en el Gran Cañón en 2001, dijo que la compañía ha hecho grandes mejoras desde ese accidente.
«Han mejorado sus calificaciones de pilotaje y su mantenimiento en los últimos 10 años y, hasta donde yo sé, no han tenido un accidente desde 2001», dijo.
De acuerdo al abogado, volar en el Gran Cañón puede ser traicionero, simplemente por la cantidad de helicópteros allí.
El portavoz de la Administración Federal de Aviación, Allen Kenitzer, dijo que el Eurocopter EC130 se estrelló en circunstancias desconocidas y sufrió daños graves.
Robb dijo que su corazón estaba con las víctimas.
«Esto no es solo el hecho de que un helicóptero se estrelló, es una tragedia humana. La gente murió y sufrió heridas terribles. Es una tragedia para los seres humanos», dijo Robb.
