Un gol en propia puerta del conjunto visitante (66 minutos) dio a los hombres dirigidos por el portugués José Mourinho su segunda victoria consecutiva en la Premier, después de caer esta semana en la Liga de Campeones ante el Basilea.
Un disparo de Ashley Young a la salida de un tiro de esquina tocó en Lewis Dunk antes de superar al arquero estadounidense Mat Ryan.
Su desventaja de cinco puntos podría no obstante verse ampliada a ocho si el Manchester City de Guardiola suma hoy ante el Huddersfield su undécimo triunfo consecutivo en el campeonato inglés.
Para los Diablos Rojos, supuso su trigésimo noveno partido consecutivo en Old Trafford sin conocer la derrota.
“Creo que ofrecimos más espíritu y corazón que calidad. Los chicos no jugaron bien, pero lo dieron todo”, declaró Mourinho en el pospartido.
En tanto, el Tottenham de Mauricio Pochettino tenía la oportunidad de alzarse al tercer puesto de la tabla, pero su empate en casa ante el West Bromwich Albion deja a los Spurs cuartos y a diez puntos del líder y a cinco del Manchester United, escolta.