domingo, octubre 6, 2024

Niños detenidos por inmigración piden su libertad para Navidades

Texas.- “Querido Santa: quiero mi libertad. Y un carro con control remoto de carrera, y unos lentes, y una cachucha, y unos transformers”, escribe el niño salvadoreño, de 9 años de edad, que ha estado detenido con su mamá durante 15 meses en el “Centro Familiar” de Berks, tras cruzar la frontera y pedir asilo. Es la segunda navidad que pasará detenido.

Mamá e hijo huyeron de El Salvador luego que la madre fue testigo de un asesinato de las maras, yestas la amenazaron, explican abogados que asisten a los detenidos en este centro de Pennsylvania, en el que las autoridades encierran a las mamás y niños migrantes que piden asilo y cuya detención se prolonga durante varios meses.

Una niña de 7 años pide un “peluchito de gatito” y estar con su familia. La pequeña y su mamá huyeron de la violencia doméstica en El Salvador.

En este caso, se trata de 16 familias, mamás con niños menores de edad, que pasarán su segunda Nochebuena y Navidad privadas de su libertad.  La mayoría son salvadoreñas, hondureñas o guatemaltecas, aunque también hay algunas brasileras.

El más joven de los niños tiene 3 añitos y aprendió a caminar entre rejas. El mayor tiene 15 años. Algunos de los niños han manifestado deseos suicidas por la prolongada detención.

S. de 6 años es uno de ellos. Le diagnosticaron PTSD, un síndrome post traumático similar al que sufren los soldados cuando regresan de la guerra. En la carta a Santa Claus escribió: “me gustan las computadoras, las play stations, ir a la playa y los juegos de video, pero no puedo hacer ninguna de esas cosas, por eso quiero salir…también extraño las pupusas de carne asada”.

Carol Anne Mauer Donohoe, parte de un pequeño grupo de abogados que ayudan a las detenidas en el centro de Berks con sus casos personales de asilo ante los tribunales, explica que la gran mayoría de las detenidas por tiempo prolongado son parte de un caso presentado el año pasado por la Unión de Libertades Civiles Americanas ACLU contra el gobierno, alegando que no se les siguió un proceso justo al ser arrestadas.

Un tribunal federal ordenó que se suspendiera su deportación mientras se litiga la demanda, pero mientras las autoridades podrían dejarla libres bajo fianza -varias de ellas tienen familiares aquí- han optado por mantener encerradas a la mayoría de ellas.

“Es difícil de entender por qué no las pueden liberar”, dijo Mauer. “Todas estas mujeres tienen sólidos casos que podrían ganar asilo, pero el gobierno se niega a darles otra oportunidad luego de realizarles una primera entrevista que no siguió los parámetros legales básicos”.

Una de estas familias logró finalmente ser liberada a mediados de este mes y la mayor de los tres hermanos, Yeslin, de 9 años, grabó un conmovedor video pidiendo la libertad de sus amiguitos en la “cárcel para bebés” que es como los abogados definen a Berks. Para el gobierno es un “centro de detención residencial”, donde actualmente viven más de 80 personas, entre madres e hijos menores de edad, la mayoría centroamericanos.

Yeslin, de 9, su hermanita de 8 y su hermano de 2 años dejaron Berks junto con su mamá la pasada semana para reunirse con el padre, que vive aquí en Estados Unidos. La familia escapó de Guatemala tras recibir amenazas, incluyendo pintadas de niños con cuchillos en el estómago en las paredes de su casa. La niña llegó a sufrir un caso extremo de ansiedad y sangrado de nariz varias veces al día, entre otros síntomas.

He aquí el video de Yeslin, en el que también manda saludos a amiguitos que dejó allí al salir de Berks.

 

La detención prolongada de niños deja una huella sicológica. Hace unos meses dos instituciones que representan a 9,000 psiquiatras infantiles y a 130,000 trabajadores sociales de todo Estados Unidos ofrecieron su opinión profesional sobre la detención de menores junto a sus padres o madres en “centros de detención familiar” de la Agencia de Inmigración de Aduanas (ICE): no es posible detener a menores de edad, aún con sus miembros de sus familias, sin amenazar gravemente su salud mental y exponerlos a repetidos traumas que llevan incluso a ideas de suicidio.

La Unión de Libertades Civiles ACLU está defendiendo a las familias en los tribunales y ha solicitado su liberación.

Artículos Relacionados

119,902FansMe gusta
16,400SeguidoresSeguir
1,486SeguidoresSeguir
17,950SeguidoresSeguir
812SeguidoresSeguir
8,430SuscriptoresSuscribirte
0
0
0
0