Chiapas.- La localización de migrantes al borde de la muerte y atrapados en mugrientos camiones rumbo al norte es una rutina habitual que evidencia la crisis humanitaria que se vive en Centroamerica.
El ultimo episodio se dio este miércoles cuando las autoridades mexicanas interceptaron en dos acciones distintas a 186 migrantes centroamericanos que se encontraban hacinados y deshidratados encamiones, mientras esperaban ser transportados hacia la frontera con Estados Unidos, señaló en un comunicado el Instituto Nacional de Migración.
El primer rescate se realizó en el estado de Tabasco, cuando agentes migratorios detectaron un camión de carga que llevaba a un gran número de personas. El chofer intentó huir con el vehículo, pero fue alcanzado por las autoridades.
En el camión viajaban 94 migrantes, 43 de ellos menores de edad entre dos y 17 años, originarios
de El Salvador, Honduras y Guatemala.
La segunda acción de rescate se llevó a cabo en el estado de Zacatecas, donde se detuvo un autobús que transportaba a 92 inmigrantes, pese a que su capacidad era sólo para 45 personas.
Los migrantes, de los cuales 23 eran menores de edad, presentaban graves signos de deshidratación y lesiones en la piel debido al hacinamiento en el que viajaban.
En ambos operataivos fueron detenidas tres personas y los 186 indocumentados fueron trasladados a las estaciones migratorias para recibir atención médica, psicológica y asistencia consular. Los 66 menores de edad fueron atendidos por Oficiales de Protección a la Infancia (OPI’s) y puestos a disposición de las autoridades del DIF.
En ambos casos, los conductores de las unidades y un copiloto, fueron puestos a disposición de la PGR
