Florida- Estados Unidos.- El presidente del Caucus Hispano del Congreso, Joaquín Castro, encabezó la comisión que visitó este martes el mayor centro de detención de Estados Unidos para menores inmigrantes, situado al sur de Miami – Florida. Castro junto a las congresistas Debbie Mucarsel-Powell, Sylvia García y Donna Shalala, se comprometió a hacer todo lo que este a su alcance para que estos niños y adolescentes se reúnan lo más pronto posible con sus familiares.
«Todo esto forma parte de un sistema de inmigración roto y moralmente en bancarrota», afirmó el demócrata Castro, también cuestionó la forma que tiene los Estados Unidos de tratar a las personas que vienen al país en busca de asilo.
El centro de detención actualmente mantiene recluidos y alejados de sus familiares a más de 1.600 indocumentados, cifra que según el plan del mandatario de los Estados Unidos, Donald Trump, pudiese aumentar a 2.400; por lo que las alarmas en contra de la intención de mantener a los niños en este lugar han sonado en todo el mundo.
Es un asunto que tiene «graves implicaciones morales y educativas», apuntó la congresista Shalala.
Tras la visita al centro, Castro, una vez más se pronunció en contra de la política migratoria del presidente Donald Trump, y enfatizó que la Administración debe honrar su «responsabilidad de reunificar a estos niños migrantes con sus seres queridos».
Los demócratas dudan de la legalidad y rechazan la actitud de mantener a niños que no han cometido ningún delito ni crímenes, encerrados en este centro.
Estos niños «no son invasores», sino niños que «han dejado atrás sus países y entrado en una nación como Estados Unidos» que ha sido por generaciones «refugio seguro y país de oportunidades», dijo el congresista que también critico que compañías privadas, como CHS, saquen provecho económico ante esta situación.
