Santiago de Chile.- Policías de Interpol Chile viajarán en los próximos días a México para aportar información que permita la extradición del exguerrillero Raúl Escobar Poblete, requerido en territorio chileno por el asesinato del senador de derecha Jaime Guzman en 1991, informaron hoy fuentes oficiales.
El director general de la Policía de Investigaciones de Chile (PDI), Héctor Espinosa, reveló a periodistas dicho trabajo conjunto, aunque no especificó la fecha del viaje de los funcionarios.
Escobar Poblete, conocido como el «Comandante Emilio», fue capturado el 30 mayo en el estado de Guanajuato tras un operativo de rescate por el secuestro de una ciudadana francesa.
El exguerrillero del Frente Patrioticio Manuel Rodriguez (FPMR) fue aprehendido portando una identidad mexicana falsa bajo el nombre de Ramón Alberto Guevara Valencia.
El «comandante Emilio» fue procesado por la Justicia chilena en calidad de autor material del homicidio del senador de la Unión Demócrata Independiente (UDI), el 1 de abril de 1991, y se encontraba prófugo de la Justicia desde el mismo año del crimen.
Según el diario La Tercera, tras la detención de Raúl Escobar Poblete, vecinos del exguerrillero habrían identificado a otro de sus compañeros en el grupo armado que operó durante la dictadura de Augusto Pinochet, Ricardo Palma Salamanca.
De acuerdo a la publicación, Raúl Escobar y su expareja, Marcela Mardones, detenida en Chile, convivían con Palma Salamanca y otra mujer conocida como Pilar y que también estaría vinculado al secuestro de la francesa Nancy Michelle.
Ricardo Palma, alias el «Negro», está condenado por el crimen de Jaime Guzmán en 1991 y escapó de la Cárcel de Alta Seguridad de Santiago en 1996, siendo uno de los prófugos más buscados por Interpol.
Guzmán es considerado el principal autor de la Constitución que el dictador Augusto Pinochet (1973-1990) impuso en Chile en 1980 y el máximo ideólogo de la UDI, partido que respaldó a la dictadura.
Tras el restablecimiento de la democracia en Chile, el Frente Patriótico Manuel Rodríguez (FPMR), que inicialmente fue el aparato paramilitar en la lucha armada contra la dictadura, se dividió y una facción denominada autónoma asesinó a Guzmán cuando salía de impartir una clase en la Universidad Católica.
