California – Estados Unidos.- José Segovia Benítez llegó a Estados Unidos con tres años de edad. El inmigrante salvadoreño años después se enlistó en las fuerzas militares y fue a defender en dos ocasiones en la Guerra con Irak al país que lo acobijó desde niño.
Pero a su regreso del país árabe en 2004 ya no era el mismo. Tenía una lesión en el cerebro y estrés postraumático.
Su vida había cambiado. En los años posteriores se vio involucrado en delitos de drogas y violencia doméstica que lo llevaron a la cárcel.
Pero al salir de prisión en 2018, el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas lo llevó a un centro de detención. Su deportación se efectuará este semana, luego de que una apelación en la corte no fuera valorada.
Veteranos de guerra lamentan el caso de Segovia y hacen gestiones para persuadir al gobernador de California, Gavin Newsom, a fin de que frene la deportación.
“Fue un héroe estadounidense, y ahora es sólo un hombre de El Salvador”, dijo Brandee Dudzic, del grupo Repatriate our Patriots. “¿Cuándo perdió esa etiqueta?”.
Familiares del ex Marine temen que a su regreso a El Salvador pueda ser víctima de pandillas.