Puebla.- Cuando Ernestina Vargas se encontró en los patios del Consulado de México en Los Ángeles a su hijo Abelardo Flores, al que no veía desde hace 15 años, no pudo contenerse y estalló en lágrimas. Madre e hijo se fundieron en un apretado y largo abrazo.
“Me siento feliz y contenta”, dijo la madre al reponerse un poco de la emoción.
“Quisiera estar siempre con ella. Quiero disfrutarla lo más que pueda”, confió Flores abrazado a su madre.
El encuentro de esta madre con su hijo fue posible gracias a ‘Raíces de Puebla’, un programa de reunificación familiar patrocinado por el gobierno del estado de Puebla en el que participan también el Consulado General de México en Los Ángeles y la organización de poblanos en en la Ciudad, Mi Casa es Puebla.
Ernestina Vargas y su hijo Abelardo Flores no fueron los únicos que se reencontraron este lunes por la noche después de años de no verse.
“Hemos traído 100 padres y madres a reunirse con sus hijos que son parte de 70 familias. La mayoría de los hijos viven en Los Ángeles pero son de 23 ciudades de California y hasta de Utah”, puntualizó Ricardo Herrera, presidente de Mi Casa es Puebla.
Explicó que el proceso de reunificación consiste en conseguir permisos y visas para que los padres puedan venir a visitar a sus hijos por 20 días. “Se lleva como tres meses todo el proceso. El viaje en avión así como las visas son pagadas por el gobierno de Puebla”, detalló Herrera.
Esta es la segunda vez en este año que el estado de Puebla lograr reunificar a padres de la tercera edad con sus hijos adultos que emigraron de su estado para venir a trabajar a Estados Unidos. “En abril trajimos a 13 padres a encontrarse con sus hijos”, comentó Herrera.
El emotivo encuentro se dio al son de las alegres notas del mariachi. Abundaban los ramos de flores, globos y pancartas de bienvenida de los hijos y sus familias para sus padres que no habían visto por años. Algunos padres e hijos lloraban a gritos, otros sollozaban y apenas si podían hablar de la emoción. Se acariciaban y abrazaban una y otra vez.