Washington – EEUU. La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) incluyó el jueves a Nicaragua entre los países que necesitan seguimiento tras la fuerte situación política por la que atraviesan y que a su vez ha acarreado inumerables violaciones a los derechos del pueblo nicaraguense.
La CIDH publicó en su informe anual la inclusión de Nicaragua gracias a “un estado de excepción caracterizado por el ejercicio abusivo de la fuerza pública para reprimir a las voces disidentes al gobierno”. El documento señala las violaciones “masivas, graves y sistemáticas” los allanamiento, las clausuras o censura a los medios, las detenciones y el exilio de comunicadores, líderes disidentes y clausuras de organizaciones civiles, por parte del gobierno de Daniel Ortega.
La Comisión registró al menos 325 muertos, más de 2.000 heridos, 550 detenidos y enjuiciados, 300 médicos despedidos y más de 80 universitarios expulsados tras las protestas que iniciaron en abril de 2018 contra el régimen de Daniel Ortega. En junio pasado, en un intento de mediar con la administración del mandatario nacional , la comisión solicitó el inicio de una investigación en el país, sin embargo, el gobierno les cerró las puertas, acusándolos de inmiscuirse en asuntos del Estado.
El escrito también hace referencia a las múltiples represiones en protestas de civiles, el uso excesivo de la fuerza de entes de seguridad del estado, la migración forzosa y la impunidad en las desapariciones de privados de libertad en el país nicaraguense.
Es la primera vez que la Comisión de Derechos Humanos, otorga a Nicaragua un seguimiento especial desde el 1981, período en el que América Central fue escenario de graves conflictos armados.
