Mercedes-Benz reducirá el número de robots en sus plantas de fabricación, una noticia que contrasta con la creciente inclusión de brazos mecánicos en el sector automotriz y otras áreas industriales, en desmedro del trabajo de operarios humanos.
No son pocos los informes que dan cuenta del sostenido avance de la automatización laboral. Una investigación emprendida por el World Economic Forum (WEF) en 15 países diferentes (puede ser consultada en este enlace) concluyó que hacia el año 2020 más de 5,000,000 de trabajadores serán reemplazados por máquinas. Otro informe, en este caso elaborado por analistas del Nomura Research Institute (NRI) y la Universidad de Oxford, vaticinó que en el año 2035 un 49% de las tareas laborales podría ser realizada por robots. El estudio (así lo repasaba Engadget) mencionó que las tareas y profesiones más amenazados por la robótica son, naturalmente, aquellas que exhiben mayor automatización.
La decisión de la automotriz Mercedes-Benz avanza en esa misma línea y es el resultado de la siguiente evaluación: si bien los robots son eficientes en muchos sentidos, no todas las tareas en la línea de producción de un automóvil pueden ser emprendidas eficientemente por las máquinas. En este sentido, desde la casa alemana destacan la flexibilidad del ser humano como un valor fundamental para adaptarse a los cambios de la industria.
Daimler
Planta de fabricación de Daimler
«Estamos ahorrando dinero y garantizando nuestro futuro con el empleo de más personas», dijo Shcaefer de Daimler.
«La variedad es demasiado grande para que la puedan abordar las máquinas con velocidad. No pueden trabajar con todas las opciones diferentes y seguir el ritmo de los cambios», dijo al respecto Markus Schaefer, jefe de producción en Daimler. El ejecutivo hace alusión a un mercado en el cual existen cada vez mayores niveles de personalización, versatilidad que las máquinas no alcanzan a cubrir velozmente pues necesitarían de una constante actualización en su programación, tarea que insume valiosos días de trabajo. «Estamos ahorrando dinero y garantizando nuestro futuro mediante el empleo de más personas», agregó Schaefer.
Por mencionar un ejemplo entre los tantos posibles, el Mercedes-Benz Clase S se ofrece en una amplia gama de opciones de equipamiento, como posavasos al interior, diversos tipos de llantas, asientos calefaccionados, entre otras alternativas que puede escoger el cliente para su vehículo.
Estos cambios están siendo aplicados en la planta de Mercedes-Benz ubicada en Sindelfingen, Alemania. De esta fábrica sale el modelo Clase S Maybach, con una producción anual de más de 400,000 vehículos.
