Barcelona.- El FC Barcelona ganó el día de ayer 2-1 al Atlético de Madrid, con un doblete del uruguayo Luis Suárez, en el partido de ida de los cuartos de final de la Liga de Campeones, poniendo un pie en las semifinales del torneo continental.
El Atlético se adelantó en el marcador con un gol de tiro raso del delantero Fernando «Niño» Torres (25), que luego dejaría a su equipo con diez al ser expulsado, pero en la segunda parte Suárez le dio la vuelta al partido (62, 74).
El Atlético salió presionando al Barcelona arriba, tratando de impedirle salir con comodidad y replegándose con velocidad formando un muro atrás, en el que el Barcelona no acababa de encontrar el espacio.
La expulsión de Fernando Torres en el minuto 35, que no podrá jugar la vuelta, cambió completamente el partido y la estrategia del Atlético, que en la segunda parte no pudo más que encerrarse en su área y buscar contraataques aislados.
Hasta entonces, el Barcelona se había dedicado a hacer su juego de toque, tratando de encontrar su oportunidad, y dio el primer aviso del partido cuando Neymar cabeceó ligeramente alto por encima del larguero un centro desde la derecha de Dani Alves (19).
Fue prácticamente la única ocasión de la primera parte en que un miembro del tridente ofensivo formado por Leo Messi, Luis Suárez y el brasileño, la famosa «MSN» logró dar el susto al portero rojiblanco Jan Oblak.
Torres no tardó en responder al atrapar dentro del área barcelonista un balón prolongado por Koke para con un tiro raso que pasó entre las piernas del meta barcelonista Ter Stegen marcar el gol de su equipo (25).
Poco después el Niño era expulsado y a la vuelta del descanso, aún con diez jugadores, el Atlético trató de seguir buscando al Barcelona en su campo, pero pronto tuvo que replegar y quedarse encerrado cuando el Barça también decidió presionar arriba.
En algo más de cinco minutos se sucedieron dos tiros de Leo Messi (49, 56) y otros dos de Neymar, uno de ellos al larguero (51, 55), hasta que en el 62 llegó el gol del empate.
Jordi Alba remató mal un centro desde la derecha, pero su tiro se encontró en el área pequeña con Luis Suárez que empujó el balón a las mallas rojiblancas haciendo el 1-1 (62).
El uruguayo, que hasta ese momento apenas había aparecido, muy controlado por la defensa rojiblanca, volvería a ver puerta poco más de diez minutos después.
Suárez envió el balón a la derecha a Alves, que la devolvió en forma de un centro al área que cabeceó el uruguayo al fondo de la portería de Oblak (74), marcando su octavo gol en ocho partidos de Liga de Campeones .
El Barcelona, tras remontar el partido, bajó un poco la intensidad con la que había empezado la segunda parte, mientras el Atlético ya no hizo más que defender para evitar que el Barcelona pudiera llevarse una renta mayor.
La victoria permite a los azulgrana encarar con cierta ventaja la vuelta en el Vicente Calderón, aunque también deja algo de esperanza para los rojiblancos.
