Charlotte – Estados Unidos.- Pese a que el director de Iron Station Elementary School trató de encubrir un caso de acoso sexual por parte de un niño hacia una compañera, cámaras de seguridad del autobús escolar donde se registró el hecho captaron en video lo sucedido y determinaron que la niña abusada no le mintió a su madre cuando le contó sobre la situación de naturaleza sexual.
Los padres de la niña, indignados, han buscado ayuda para que en el caso de la pequeña exista una respuesta efectiva.
«Mi corazón se rompió como padre», dijo Shannon Proctor.
La pequeña de 9 años de edad confesó a su madre que durante un traslado a la escuela en el aútobús escolar, otro estudiante de Iron Station Elementary, un niño de 10 años, la obligó a realizar actos indebidos.
«Ella me dijo que un niño pequeño, un niño de quinto grado en el autobús la había estado atrapando en el asiento 1142 y la había tomado por la cabeza y la había presionado contra sus partes privadas», dijo Proctor, quién agregó que «Es una pesadilla hecha realidad: no sabes qué decir o qué hacer».
La pequeña también indicó que la demanda sexual del niño era especifica y se la realizó varias veces. Todo lo expresado por la estudiante fue captado por la cámara del autobús.
«El subdirector está en los autobuses y me aseguró que se tomaría en serio, que era una situación grave, que las autoridades estarían involucradas porque tendrían que informar algo como esto porque era un asalto, un asalto sexual en el límite», informó Shannon Proctor.
Pese a lo prometido por una de las autoridades de la escuela, a pocos días de lo sucedido Proctor participó en una asamblea en la que su hija fue honrada por buena estudiante, en ese acto la familia se enteró que la escuela no había denunciando ante las fuerzas de orden público lo sucedido en el autobús.
«El directo se acercó a mí y se sentó a mi lado en una mesa con otros padres y comenzó a discutir este incidente frente a estos otros padres», dijo Proctor.
No conforme con ignorar la solicitud de denuncia realizada por Proctor en contra del acoso sexual, el director afirmó que fue la niña la que agredió el niño de 10 años: «Creo que probablemente necesites conversar con ella sobre la diferencia entre la buena atención y la mala atención».
«En ese momento pensé que iba a vomitar», dijo Proctor.
Al salir de la escuela, la madre fue a la Oficina del Sheriff del Condado de Lincoln, allí confirmó que nadie de la escuela había contactado para presentar la denuncia.
«Creo que cuando hablé con ellos entendieron que debería haber sido reportado. Creo que cada vez que haya un asalto, cualquiera que tenga conocimiento de eso probablemente debería informarlo a las fuerzas del orden público, así que en este caso, creo que deberían habernos avisado «, dijo el detective del condado de Lincoln Kelsey Harrington.
El informe policial sobre el caso muestra que el detective vio el video del autobús escolar y dice que el mismo «muestra claramente estos incidentes» como describió la niña.
El informe también detalla un «asalto» físico a otro niño en el que el mismo «autor admitió haber usado insultos raciales».
«La forma en que se trató es despreciable, es deplorable», dijo Proctor. «La forma en que el director lo manejó y la forma en que trató de esconderlo bajo la alfombra para mí es un comportamiento inexcusable y el debe ser responsable de ello».