Pekín – China.- Lo que era más que probable, finalmente sucedió. Un hombre falleció, este jueves, en Hong Kong, convirtiéndose en la primera víctima mortal de las protestas antigubernamentales que se desarrollan en la región autónoma, desde hace unos cinco meses.
El sujeto, un septuagenario que trabajaba como obrero para el Departamento de Higiene Alimentaria y Medioambiental, fue atacado, en la cabeza, con un ladrillo. El incidente se registró durante las movilizaciones ocurridas el miércoles, en la zona de Sheung Shui. Su muerte, sin embargo, fue anunciada la noche de este 14 de noviembre.
De acuerdo con las versiones oficiales, el anciano aprovechó su descanso para trasladarse hasta el lugar en el que ocurrían las protestas. Su objetivo, ha dicho la Policía hongkonesa, era el de tomar fotografías de los enfrentamientos entre manifestantes y vecinos del sector en el que se registraban los choques.
Algunas imágenes muestran el momento en el que hombre cae al suelo, pero no permiten determinar el lugar de procedencia del objeto contundente.
“Ambos lados creen que la culpa es de sus adversarios y hay dos vídeos, cada uno de los cuales apoya una versión opuesta de la historia”, ha precisado Antony Dapiran, un abogado que reside en Hong Kong y que se especializa en movimientos de disidencia.
El jurista cree que lo sucedido “crea una situación peligrosa”, pues, a su juicio, “provocará más división social y episodios de justicia popular”.
Ante esa posibilidad, el Gobierno de la región autónoma emitió un comunicado. El texto garantiza que las autoridades trabajarán para llevar frente a la justicia a los “alborotadores encapuchados que han llevado a cabo acciones extremadamente peligrosas y violentas”.
Por su parte, voceros de la Policía de Hong Kong han asegurado que hay varios sospechosos y que se encuentran plenamente identificados.
