San Luis Potosí – México.- La violencia invadió al fútbol mexicano. El partido de primera división entre Atlético San Luis y Querétaro fue suspendido cuando faltaban cinco minutos para el final, debido a la batalla campal en las tribunas que obligó a aficionados a invadir el terreno de juego para resguardarse.
La cantidad de heridos que dejó el suceso, menos habitual en México que en otras de las ligas más importantes del continente, no ha sido precisada, pero algunos medios locales han dicho que supera los 30.
Los equipos Atlético San Luis y Querétaro tienen una vieja rivalidad deportiva en el fútbol mexicano debido a su cercanía en el centro de México.
En las imágenes trasmitidas por televisión y en las que circulan en redes sociales se puede apreciar a los “ultras”, fanáticos radicales, lanzar sillas, contenedores de basura, entre otros objetos. Personas ensangrentadas tuvieron que ser evacuadas en camillas.
La gente en la tribuna corría despavorida para evitar ser alcanzada por los violentos. Los niños lloraban de miedo.
La liga mexicana deploró los sucesos en comunicado. Se espera que el Estadio Alfonso Lastras, donde Atlético San Luis es sede, sea sancionado, así como el equipo local que no garantizó la seguridad.
La semana pasada un encuentro entre el local, Dorados de Sinaloa, y el Atlante, fue suspendido debido a enfrentamientos entre militares y narcotraficantes que desataron el pánico en Culiacán.
