Guayaquil – Ecuador.- A casi dos semana de intensas protestas en Quito, en las que murieron siete personas, más de mil 300 resultaron heridas y 1,152 detenidas, el presidente de Ecuador, Lenín Moreno, derogó durante un diálogo con las partes, el decreto con reformas económicas que generó un alza en los precios de los combustibles y con ello las protestas en el país.
La mesa de diálogo en la que Moreno tomó la decisión, estuvo conformada por el mandatario y los líderes indígenas, además contó con la mediación de la ONU, la Iglesia Católica y rectores de universidades estatales y privadas. El diálogo puso fin de manera automática a las protestas.
“Se terminan las movilizaciones y medidas de hecho en todo el Ecuador y nos comprometemos de manera conjunta a restablecer la paz en el país”, señalan en un convenio las partes.
Por su parte Moreno expresó: “Hemos tenido un acuerdo, que como bien se ha manifestado de lado y lado ha significado sin duda alguna, sacrificio de cada una de las partes, porque eso es precisamente un acuerdo”, agregando que, “no significa ganarlo todo”.
Con relación a las medidas económicas, el presidente Lenín Moreno anunció a través de redes sociales que se promulgará un nuevo decreto “que contenga mecanismos para focalizar los recursos en quienes más los necesitan”.
Las reformas económicas en Ecuador, aprobadas por Moreno y que desencadenaron el caos y la protesta, se mantuvieron vigentes desde el 1 de octubre y hasta el 13, justamente los 12 días que duraron las manifestaciones callejeras. La presión de los manifestantes de diferentes sectores, especialmente indígenas, lograron que el gobierno diera un paso atrás en su decisión.
En principio y según lo anunciado por el gobierno de Moreno, dichas reformas económicas permitirían estabilizar las finanzas fiscales y reducir sustancialmente un abultado déficit.
“Creo que ha sido importante este acercamiento, hace tiempo queríamos conversar de estos procesos, quisiéramos también de corazón decir que los pueblos y nacionales nos hemos levantado en busca de la libertad”, dijo el máximo dirigente indígena, Jaime Vargas.
