Río de Janeiro – Brasil.-La pasada semana y vestido de mujer, el narcotraficante Clauvino da Silva, intentó fugarse de la prisión de Bangú 3 en Brasil, luego de ser capturado y enviado nuevamente a prisión, el hombre de 42 años de edad quien cumplía una condena por tráfico de drogas que superaba los 70 años, fue encontrado muerto en el interior de su celda. Al parecer, y según indica la Secretaria de Estado de Administración Penitenciaria (Seap) de Río de Janeiro, Da Silva murió ahorcado con una sábana.
Autoridades penitenciarias de Brasil abrieron una investigación del caso para determinar qué pudo haber originado la muerte del narcotraficante y saber si el ahorcamiento fue suicidio o provocado por algún recluso que se encuentre en la prisión de máxima seguridad Laércio da Costa Pelegrino, conocida como Bangu I, en Río de Janeiro, donde había sido ingresado Da Silva tras su intento de fuga.
El loco e insólito plan de fuga del narcotraficante conocido como ‘Baixinho’ dio de que hablar en todo el mundo, su disfraz de mujer no solo estaba compuesto por ropa de su hija, también incluía lentes, una peluca de cabello largo y una máscara de silicona para despistar a los funcionarios. El plan no le funcionó y fue descubierto.
Da Silva ya se había fugado de la prisión en 2013, junto con otros 30 presos, quienes huyeron de una de las cárceles del mismo complejo por el sistema de alcantarillado. Fue recapturado un mes después.
