Miami, FL. – Las remesas de dinero enviadas por emigrantes mexicanos a su país registraron en mayo su nivel más alto desde 2008, según el banco nacional de México, alcanzando los 2.586 millones de dólares. En los primeros cinco meses sumaron 11.532 millones, un 6,3% más que en el mismo periodo del año anterior. El envío medio fue de 304 dólares. La cifra de mayo es la segunda más alta desde que existe registro (enero de 1995), después de la de octubre de 2008 (2.638 millones).
El volumen de remesas provenientes de Estados Unidos cayó en los tres primeros meses del año, hasta los 6.378 millones de dólares (200 menos que en el último trimestre de 2016). Sin embargo, suponen la mayoría del dinero enviado por emigrantes mexicanos (el 93% están en el país vecino, según Naciones Unidas), que entre enero y marzo ascendió a 6.640 millones.
Mayo es un mes en el que tradicionalmente repuntan las remesas, quizá por el día de la Madre. Un informe publicado por Naciones Unidas en junio asegura que 800 millones de personas en todo el mundo dependen de las remesas para sobrevivir. En México, supusieron el 2,3% del Producto Interior Bruto en 2016. El flujo de remesas en este país se ha mantenido estable en los últimos años pese a que el volumen de emigrantes creció un 13% en una década. México suma cuatro de cada 10 dólares recibidos en remesas en Latinoamérica, y es el cuarto país a nivel mundial en volumen de dinero recibido.
Cerca de la mitad de emigrantes mexicanos en Estados Unidos son irregulares, lo que explica en parte el alto volumen de envíos, según el anuario de migración y remesas de 2016 elaborado por el Consejo Nacional de Población y el banco BBVA. En 2015 había 12,2 millones de emigrantes mexicanos en el país vecino; la edad media en la que salen del país ronda los 31-32 años, y menos del 20% tiene estudios superiores: los hombres suelen dedicarse a la construcción, y las mujeres al ocio y la hostelería, según este estudio.
