Washington – EEUU.- El presidente Donald Trump envió un mensaje a los inmigrantes indocumentados que han llegado o están por arribar a Estados Unidos.
“Si (…) están descontentos con las condiciones de los centros de detención, rápidamente construidos y reacondicionados, (…) no vengan”, escribió el Jefe de Estado en su cuenta verificada de Twitter.
Trump lanzó sus palabras dos días después de que legisladores demócratas visitaran un refugio para migrantes, localizado en la ciudad de El Paso, en Texas.
Los parlamentarios describieron como “horribles” las condiciones del recinto y también el trato dado, por agentes federales, a las personas que se encontraban en el centro.
La congresista por el estado de Nueva York, Alexandria Ocasio-Cortez, denunció que mujeres inmigrantes aseguraron que los oficiales les hacían tomar agua de los retretes, cuando éstas les informaban que tenían sed.
Por su parte, el Inspector General del Departamento de Seguridad Nacional publicó el martes una serie de fotos del refugio ubicado en Valle del Río Grande, en Texas.
En las gráficas se aprecia el hacinamiento en el que viven decenas de indocumentados.
Pese a todo ello, el presidente Trump felicitó a los agentes de la Patrulla Fronteriza (CBP, por sus siglas en ingles). Dijo que los integrantes de ese cuerpo hacen un “gran trabajo” y aclaró que, entre ellos, no hay “trabajadores de hospital, médicos o enfermeras”.
La última afirmación ha sido tomada como una respuesta a los informes que han confirmado la muerte de inmigrantes ilegales, mientras estaban bajo la supervisión de la CBP.
También ha sido interpretada como una reacción del titular de la Casa Blanca a la investigación que reveló el portal web ProPublica. Según ese trabajo, funcionarios de la Patrulla Fronteriza habrían empleado un grupo de Facebook para burlarse de la muerte de un joven indocumentado, de 16 años, y para mofarse de congresistas de origen hispano.
