Washington – EEUU. El Comité de Servicios Armados de la Cámara de Representantes de Estados Unidos llevó a cabo una audiencia el pasado miércoles con el objetivo de evaluar la posibilidad de garantizar a través de una ley que las personas transgénero puedan servir en las Fuerzas Armadas, posibilidad con la que el presidente Donald Trump no está de acuerdo.
«El Congreso no puede permitir que la Administración imponga sus impulsos discriminatorios», aseguró la congresista demócrata Jackie Speier.
El Gobierno lucha en los tribunales para impedir que transexuales puedan alistarse en el Ejército, alegando que su presencia en las Fuerzas Armadas afecta la operatividad de las tropas y supone una carga económica para el presupuesto del Pentágono.
Los testigos trataron de explicar por qué el veto que quiere imponer Trump carece de fundamentos prácticos. «Cada vez que el Ejército ha incorporado a un grupo minoritario se ha encontrado con resistencia, citando la capacidad de acometer una misión, la cohesión de la unidad o la moral de las tropas», lamentó el capitán de corbeta Blake Dremann, uno de los seis testigos que comparecieron este miércoles ante el comité.
Jesse Ehrenfeld, uno de los testigos sostuvo que la investigación existente bloquea los argumentos gubernamentales pretenden prohibir el alistamiento de reclutas que pudieran querer someterse a una operación de cambio de género, lo que se conoce disforia.
«Los estudios demuestran que las personas que son diagnosticadas con disforia de género y reciben los cuidados médicos apropiados no tienen una menor disponibilidad para ser desplegados que sus compañeros», apuntó el médico.
