Toronto – Canadá.- Antes de debilitarse y desaparecer por completo, el huracán Dorian hizo una última parada en la costa este de Canadá. El fenómeno tocó tierra el sábado, por la tarde, cerca de la ciudad de Halifax y aún el domingo castigaba al oriente canadiense, con una inusitada intensidad, a pesar de su categoría 1.
Durante su paso, el ciclón arrancó árboles y derribó los techos de varios edificios de apartamentos. Sus vientos tuvieron, incluso, la fuerza necesaria para desmoronar una enorme grúa de construcción.
A pesar de su feroz embestida, Dorian no dejó víctimas fatales en Canadá ni Estados Unidos. Sin embargo, sí es responsable de las 43 muertes que, hasta el momento, se han contabilizado en Bahamas.
Según las autoridades de la isla, 35 de esos decesos se produjeron en las islas Ábaco y ocho en Gran Bahama. La Cruz Roja Internacional ha advertido que miles de personas se encuentran a la espera de asistencia humanitaria y que, por lo menos, 13 mil casas fueron dañadas o destruidas.
