Beneficiarios de un programa humanitario que les ampara de la deportación y les concede un permiso temporal de trabajo están enviando al presidente Donald Trump postales donde le piden que use su discrecionalidad y no les cancele este beneficio.
“Le haremos llegar 20,000 tarjetas”, anuncia Francisco Portillo, director ejecutivo de la organización hondureña Francisco Morazán en Miami, Florida. “Y entre septiembre y octubre haremos lo mismo con el secretario de Seguridad Nacional, John Kelly, para que nos renueven el Estatus de Protección Temporal (TPS)”, agregó.
El TPS de Honduras fue otorgado en 1998 tras el paso del huracán Mitch. También fue extendido a inmigrantes indocumentados de Nicaragua, país que también fue severamente impactado por el paso del ciclón.
En la postal, que lleva el nombre y la firma del inmigrante amparado por el beneficio, le piden a Trump que “ejerza su discrecionalidad para extender el programa”, e indican que debido a la devastación causada por el huracán Micth “todavía hay personas en Honduras viviendo en condiciones caóticas”.
“Apelo a sus valores humanos y urgimos en esta oportunidad que apoye a las personas que trabajamos duramente y nos conceda una extensión” del programa humanitario. El gobierno de Donald Trump decidirá si renovar o no el TPS de salvadoreños, hondureños y nicaragüenses en 2018.
Además del TPS a Honduras y Nicaragua, que actualmente beneficia a poco más de 60,000 indocumentados, en 2001 el gobierno de Estados Unidos otorgó un beneficio similar a El Salvador tras el azote de dos terremotos. El amparo tiene frenadas las deportaciones de 192,282 inmigrantes sin papeles.
Aportes significativos
La mayoría de los poco más de 250,000 indocumentados centroamericanos con TPS viven en ciudades repartidas por cinco estados: Los Ángeles (34.1%), Houston (28.7%), Washington DC (21.0%), San Francisco (9.4%), Nueva York (4.9%) y Nueva Jersey (1.9%), de acuerdo con un estudio elaborado por la doctoraCecilia Menjívar del Centro de Investigaciones Migratorias (CMR) de la Universidad de Kansas.
Entre otros hallazgos, el estudio reveló que:
- Los beneficiarios del TPS tienen niveles significativamente altos de participación en la fuerza de trabajo de Estados Unidos: 94% de los hombres y 82.1% de las mujeres.
- El 83.2% de los hombres y el 54.9% de las mujeres trabajan más de 40 horas por semana.
- El 7.6% de los hombres y 10% de las mujeres trabajan en más de un empleo.
- Aproximadamente una décima parte de los encuestados eran trabajadores autónomos (hombres 13.4%, mujeres 7.8%).
- Los hombres trabajan en construcción/pintura (18.9%), choferes (9.3%), limpieza (6.3%), cocina (3.2%) y jardinería (2.8%).
- Las mujeres se concentran en la limpieza de edificios (16.5%) o casas (12.2%), cuidado de niños (7.6%), cocina (6.0%), o en corte y confección (5.8%).
Cuánto ganan
El estudio de Menjívar también señala que el ingreso promedio mensual de los encuestados es de 2,909.87 dólares mensuales (hombres 3,597.64 dólares y mujeres 2,054.31 dólares).
Añade que el 33.6% de los hombres y el 29.94% de las mujeres de la encuesta viven en hogares declarados como ocupados por sus dueños. Y que el nivel educativo promedio de los encuestados en el momento en que llegaron a Estados Unidos fue de 7.64 años.
Otros datos del reporte:
- El 49,2% de ellos ha avanzado en su educación en Estados Unidos.
- Se inscribieron en al menos un programa educativo, tal como cursos de inglés (36.4%), diploma de bachillerato (9.6%), certificado vocacional (4.9%), cursos universitarios (1.6%) y Universidad (1.0%)
- El 29.7% de los encuestados hizo trabajo voluntario en organizaciones cívicas, comités o grupos comunitarios en los 12 meses previos al estudio, mostrando altos niveles de integración social.
- El 20.2% participa en actividades para beneficiar a su comunidad incluyendo donar sangre, limpieza de calles, etc.
- El 80.3% de los encuestados pagan impuestos sobre la renta, incluyendo el 79.3% de los que trabajan por cuenta propia.
Menjívar dijo que los beneficiarios del TPS que pagan impuestos han contribuido a la seguridad social para un promedio de 15.4 años, y que un 90% declara impuestos anuales.
Reunión con el presidente Hernández
La semana pasada el presidente de Honduras, Juan Orlando Hernández, visitó Miami, Florida, donde asistió a una cumbre de países centroamericanos. La agenda incluyó una reunión con la comunidad inmigrante protegida por el TPS, a quienes les dijo que respaldaba los esfuerzos para que el gobierno del presidente Trump conceda una nueva prórroga.
“Nos dijo que respaldaba nuestras peticiones, y que insistiría ante el gobierno de Washington, junto con los presidentes de Nicaragua y El Salvador, para que cuando llegue la fecha la Casa Blanca extienda los amparos de las deportaciones y los permisos de trabajo de nuestra comunidad”, dijo Portillo.
“El escuchó nuestros testimonios, nuestros logros, y los aportes que hacemos a Estados Unidos y a nuestros países”, agregó el activista.
“Reconocemos que es una decisión soberana de Estados Unidos, pero le aseguro que esas personas migrantes aún con un estatus temporal, son de lo mejor que puede tener este país, con empleos y con sus familias”, dijo el mandatario durante una rueda de prensa.
Marcos Ayala, otro de los integrantes del grupo que se reunió con Hernández en Miami, dijo a Noticias Univision que tras el encuentro “confiamos en Dios en que el presidente Donald Trump escuchará nuestras voces y nos dará la protección que le estamos pidiendo”.
En los primeros cuatro meses de 2017 los salvadoreños con TPS en Estados Unidos enviaron remesas por 1,581 dólares, según datos del Banco Central de Reserva. El gobierno der Honduras registra 964.4 millones en el primer trimestre, mientras que Nicaragua contabilizó 323.3 millones de dólares en el mismo período.
