Managua-Nicaragua.- El presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, ordenó el lunes el regreso de más de 1,8 millones de estudiantes, correspondientes a todos los niveles de la educación, y la reanudación de las actividades laboraes de unos 130 mil empleados públicos, a pesar de las medidas de prevención recomendadas por la Organización Mundial de la Salud (OMS) por la pandemia COVID-19.
El regreso a clases se produce tras 15 días de «receso» por la celebración de la Semana Santa, decretado por el Gobierno de ese país.
El asesor presidencial para la Educación, Salvador Venegas, precisó que en los centros de estudios «se activaron los protocolos del Ministerio de Salud», en relación a las medidas de prevención por el coronavirus.
Sin, embargo, algunos medios de comunicación nacionales e internacionales, han asegurado que un gran número de representantes no acataron el llamado a clases y no enviaron a sus hijos a las aulas.
«Prefieren que sus hijos pierdan clases en vez de exponerlos a un posible contagio por COVID-19», reseñaron medios locales.
Antes del anuncio del presidente Ortega, unos 57 mil docentes y técnicos de Educación habían reanudado sus labores, al igual que unos 160 mil estudiantes de las universidades públicas y 130 mil empleados estatales luego de un período sin actividad que el Gobierno calificó de “vacaciones”.
