Ciudad de México – México.- Un grupo de casi 70 migrantes venezolanos permanece retenido dentro de las instalaciones del Aeropuerto Internacional de Cancún, en México.
La denuncia fue hecha por Carlos Sánchez, un ciudadano que nació en Venezuela, pero que tiene residencia legal en Chile.
Sánchez, un joven modelo, de 23 años de edad, partió desde territorio chileno con rumbo a México. Decidió visitar Cancún para cumplir con algunos compromisos personales y, también, para descansar.
Sin embargo, tras su arribo a la terminal aeroportuaria, agentes migratorios le dijeron que no podía ingresar a la nación azteca. Posteriormente, le obligaron a entregar sus pertenencias, incluyendo su celular e identificaciones.
Más tarde, Carlos fue llevado a hasta una sala en la que encontró a decenas de connacionales que, según su relato, se acercaron a él, confundidos y desorientados.
“Cuando camino, en el sitio había 69 venezolanos y me ven y me dicen: ‘oye, ¿qué hora es? ¿Qué día es? ¿Eres venezolano?”, comentó.
Al narrar su historia, el joven modelo contó que, en aquel salón, había unos diez menores de edad. “Los tenían en interiores, (…) los tenían detenidos y no sabía por qué”.
Sánchez, quien fue dejado en libertad, luego de comprobar la autenticidad de sus documentos chilenos, agregó que sus paisanos permanecían en condiciones infrahumanas, soportando un aire acondicionado intenso y durmiendo en colchones malolientes.
Antes de ser deportado, funcionarios del aeropuerto lo amenazaron, garantizándole que habría consecuencias si no guardaba silencio.
“Vamos a hacer una cosa – le dijeron – te vamos a regresar a Santiago de Chile y la única condición que debes aceptar es que nunca viste nada de lo que viste, nunca hemos hablado nada de lo que escuchaste y, si llegas a hablar, te vamos a colocar, en tu pasaporte, una alerta migratoria”.