Arizona – Estados Unidos.- Las medidas migratorias tomadas por la administración de Donald Trump sobre aquellos migrantes que han solicitado asilo luego de cruzar la frontera entre Estados Unidos y México, continúan endureciéndose. Este viernes se pudo conocer que el Gobierno ha decidido que las personas que han solicitado asilo en el sector fronterizo de Tucson, Arizona, también deberán esperar la resolución de sus casos en el país vecino, México; la medida hasta la fecha solo se había aplicado para los solicitantes en algunas zonas de Texas y California.
El nuevo plan de Trump en contra de los migrantes, quedó al descubierto luego de que un importante medio de comunicación tuviese acceso a un correo electrónico enviado a varios agentes de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés).
En el texto enviado a los agentes de la CBP, se da la orden de aplicar la medida de devolución forzada de migrantes a México también en los casos considerados idóneos y detectados en la parte de la frontera sur.
El programa “Quédate en México”, que simplemente representa el retorno forzado a México de migrantes que solicitan protección a Estados Unidos, arrancó en el mes de enero del presente año. El mismo prevé algunas excepciones, por ejemplo para niños no acompañados, pero sí se aplica a migrantes que declaren tener miedo de volver a México por sentirse amenazados en ese país.
El correo enviado a los agentes de CBP para extender el plan al sector de Tucson a partir de este viernes, determina que los solicitantes de asilo en esta zona tienen que ser trasladados primero a El Paso, Texas, y después al otro lado de la frontera.
Tucson, es el segundo punto de acceso por número de llegadas de inmigrantes, después de El Paso; solo en octubre alrededor de 6.300 migrantes indocumentados cruzaron la frontera en ese sector de Arizona.
