Carolina del Norte – Estados Unidos.- En Carolina del Norte han saltado las alarmas debido a que en las plantas de procesamiento de alimentos se han confirmado casos de trabajadores con COVID-19, lo cual pudiera afectar su funcionamiento en caso den un aumento de contagios.
«Estos trabajadores son tan esenciales como cualquiera que esté luchando contra el brote pandémico», dijo el comisionado de Agricultura, Steve Troxler.
Troxler dijo, en declaraciones que publica WBTV, que en el estado están siendo proactivos para tratar de mantener las plantas operando lo más completamente posible.
El funcionario sabe que cualquier falla podría afectar la cadena de distribución.
A Troxler le preocupa el impacto en las granjas del estado si las plantas disminuyen su velocidad porque los trabajadores siguen enfermándose. Las fuentes de proteína en las granjas podrían tener que ser sacrificadas si no se pueden poner en la cadena de suministro, dijo según recoge WBTV.
«Este es un terrible golpe a la agricultura. Alimentamos al país a nivel de granja», apreció el comisionado.
El Departamento de Salud y Servicios Sociales de los Estados Unidos ha emitido directrices para la prevención del coronavirus como la creación de espacios y barreras entre los trabajadores, la desinfección de todas las áreas de la planta, el suministro de equipos de protección y desinfectante de manos, y la evaluación previa de los empleados para detectar fiebre y síntomas antes del trabajo.
Troxler reconoce que en cualquier planta de fabricación en algún momento ocurrirá una aglomeración de personas, pero lo cual dijo que hay que trabajar en el “distanciamiento social, la separación, el saneamiento, todo esto es parte de lo que va a tener que suceder para mantener todas nuestras plantas abiertas».
Hasta el momento cinco plantas de procesamiento de alimentos han confirmado casos de COVID-19 en sus trabajadores. El martes, las granjas Mountaire confirmaron contagios en sus plantas de Siler City y Lumber Bridge.
