Texas- Estados Unidos.- Residentes a lo largo de la frontera de EE.UU. y México se unen para presentar una demanda contra la decisión de la administración de Trump de construir un muro utilizando toda o parte de su propiedad, temen perder sus viviendas.
Entre los casos que se han presentado, resalta el de Nadia Álvarez, quien durante toda su vida ha residido en una casa cercana a Rio Grande. Ella manifiesta que por ese espacio jamás ha visto ningún inmigrante tratar de cruzar la frontera.
Denunció que hace varios meses funcionarios estadounidenses ingresaron a su propiedad y le notificaron que construirían el muro solicitado por Donald Trump, tomando su propiedad.
Ya le han llegado tres cartas de la Oficinas de Protección y Aduanas pidiéndole permiso para evaluar su terreno, sin embargo ella se ha negado.
En los próximos días el Gobierno de los Estados Unidos, le ofrecerá a Nadia un precio por su propiedad de 3 hectáreas, de no aceptarlo el Estado podría declarar la expropiación forzosa y pagar lo que consideren.
La afectada indicó que continuará con el juicio privado contra el presidente Donald Trump, hasta sus últimas consecuencias y así “tenga que encadenarme en la vivienda no voy a permitir que me quiten mi propiedad para construir el muro”
Fred Cavazos, un hombre mayor y en silla de ruedas es otro de los afectados que también demandan a Trump, su propiedad de 28 hectáreas se encuentra entre las tierras que necesita el gobierno para construir el polémico muro fronterizo.
El Gobierno de Trump ha comenzado a levantar planos topográficos de los terrenos en la frontera de Texas y ha anunciado planes para comenzar la construcción el próximo mes. Los propietarios prometen rechazar las ofertas de compra del Gobierno y pelearán con el Gobierno en corte.
