Carolina del Norte – Estados Unidos.- Ante la decisión del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de mantener abiertas las plantas procesadoras de carne pese a haberse convertido en un foco de contagio de la COVID-19, compradores y representantes de grandes cadenas de alimentos han reaccionado al decreto que se establece a partir de la Ley de Producción de Defensa de EEUU. Actualmente en el país existe un gran temor por la posible escasez de carne debido a que las principales plantas procesadoras se han visto obligadas a cerrar sus puertas motivado virus.
Grandes cadenas de supermercados como Publix o Harris Teeter ya han expresado la posible necesidad de reducir la oferta y la demanda cárnica. Pese a que las tiendas de comestibles intentan regresar a la normalidad y mostrar suficiente carne en sus estantes, la situación se torna difícil.
“Pechuga de pollo; Es realmente difícil encontrar eso”, dijó Kallista Beeson, comprador de Shipt, quien continuó diciendo “Al principio, era realmente difícil encontrar carne molida. Ahora, ha mejorado mucho».
Por su parte, y a través de una carta, el presidente de Tyson Foods, una de las grandes procesadoras afectadas manifestó que «la cadena de suministro de alimentos se está rompiendo» y agregó que Tyson Foods y sus competidores tendrán que cerrar más plantas debido a los brotes de COVID-19 y la escasez de personal.
“Estoy en desacuerdo”, “No estoy de acuerdo con eso. En este momento no creo que sea necesario hacerlo”, expresó una compradora de carne identificada como Seta Rincon, ante el decreto firmado por Trump.
Mientras que el comprador Michael Nobiletti dijo: “Sí, creo que es una buena idea. Creo que sin duda la infraestructura crítica que queremos mantener abierta, y el gobierno está aquí para ocuparse de estos asuntos realmente importantes”.
“Nuestros proveedores tienen varias plantas, por lo que si se producen cierres, podemos mover los pedidos a una instalación diferente, o potencialmente a un proveedor diferente”, manifestó Publix.
Harris Teeter también respondió: “Eliminar cualquier cantidad de producto del mercado pone presión en cada aspecto de la cadena de suministro en todas las compañías (…) Es probable que vean una escasez temporal en el suministro de carne en las próximas dos semanas.”