Houston.- Las fuertes tormentas e inundaciones que han azotado el sur de Estados Unidos en los últimos días han dejado ya seis personas muertas en Texas y Oklahoma, mientras que una decena siguen desaparecidas.
Además de los tres fallecidos, dos de ellos en Oklahoma y uno en Texas, las autoridades reportaron otros tres muertos en estos dos estados.
En DeSoto (Texas), fue hallado en un colector de aguas pluviales el cuerpo sin vida de un joven de 14 años desaparecido días atrás, cuando salió a pasear con sus dos perros, según reportó la emisora especializada The Weather Channel.
Por otro lado, una joven de 18 años murió en Devine (al sur de San Antonio, Texas), cuando el agua arrastró el vehículo en el que se dirigía a su casa después de asistir a su fiesta de graduación, informó la cadena Fox.
En Sapulpa (Oklahoma), un hombre de 37 años murió a causa del temporal, según el Departamento de Gestión de Emergencias estatal, que no ofreció más detalles.
El gobierno local ordenó a los residentes de la ciudad de San Marcos (Texas) la más golpeada, a evacuar sus hogares, cuando las aguas crecían rápidamente en torno a la ciudad tras una lluvia torrencial que convirtió las calles en ríos serpenteantes.
Estas muertes se suman a las de una mujer de 33 años que falleció el 8 de septiembre dentro de su automóvil arrastrado por la corriente y la de un bombero que se ahogó cuando trataba de rescatar a otros ciudadanos el domingo, ambas en Oklahoma.
También en Texas hubo un fallecido el domingo en la ciudad de San Marcos a raíz de la crecida del río Blanco.
En escenas surrealistas, se veían autos y camionetas sumergidas y la gente flotando en sillones inflables por las calles inundadas.
El gobierno de la ciudad indicó que abrió refugios temporarios para albergar a los residentes que no podían regresar a sus hogares.
El caudal del río Blanco creció más de seis metros, superando tres veces su nivel y anegando tramos de la carretera interestatal 35, una de las más importantes de Texas, obligando a las autoridades a cerrar la autopista en esas áreas.
En otras áreas más al este, las autoridades evacuaron a cerca de mil personas que ocupaban unas 400 viviendas en los alrededores de la represa del lago Lewis, a unos 80 kilómetros al norte de Houston.