Por: Margarita Vidal/
Charlotte, NC.- Con una concurrencia sin precedentes cerca de 20 mil personas se celebró el Festival de Puerto Rico, que logró llenar por completo todas las inmediaciones del Symphony Park de la ciudad de Charlotte. Personas de todas las edades y provenientes de diferentes localidades coincidieron para festejar por todo lo alto esta gran fiesta de pueblo, donde se pudo percibir la cultura puertorriqueña y disfrutar a todo dar.
La puertorriqueña Janiris Battle, de 25 años, viene desde la ciudad de Ashboro, Para ella, asistir al festival es una tradición. “Cada año vengo a compartir con mi familia y amistades, pasamos un momento agradable y nos divertimos bastante”, nos cuenta. Los olores y colores de la gastronomía puertorriqueña dijeron presente en su máxima expresión. Los asistentes disfrutaron de empanadas, chicharrones, asados, alcapurrias, plátanos y pernil, entre otros platillos. Carpas repletas de comida típica y largas filas fueron la nota común del festival. De esto dieron testimonio las mexicanas Cristina Hernández y Maritza Gonzáles, de 24 y 27 años respectivamente. “La comida estuvo deliciosa, hemos pasado un momento muy agradable aquí compartiendo con nuestros amigos”, dijeron. Sana diversión al aire libre El verde pasto sirvió de alfombra para que cientos y cientos de personas se tendieran a escuchar la atracción artística del día: “El Gran Combo de Puerto Rico”, que puso a todos a bailar en aquella tarde de algarabía donde el calor latino y la expresión de solidaridad predominaron. “El crecimiento de los hispanos es grande, miles de personas bajando para Charlotte es algo que nos halaga y beneficia, porque significa que nuestra comunidad sigue aumentando, me siento orgulloso de ser latino y compartir entre familia”, manifestó Francisco Amaro, Chef de profesión, de 47 años. Ofertas, regalos y juegos Pequeños empresarios también ofertaron sus productos y servicios. No faltaron las ofertas, los regalos y los concursos. “Es muy importante reunir a la comunidad para apoyarnos mutuamente, puertorriqueños, hispanos, afroamericanos, blancos, todos son bienvenidos a pasar un buen tiempo”, dijo la puertorriqueña Lisvette Soto, quien reside en Charlotte desde hace más de 23 años. No faltaron candidatos políticos que también aprovecharon la ocasión. “Mi madre es puertorriqueña y yo amo la cultura latina”, apunto Ryan McGill, candidato a concejal de representación general. El Festival Puertorriqueño es uno de los festivales étnicos de mayor impacto del condado Mecklenburg y celebra la cultura y el patrimonio de la población puertorriqueña e hispana de la región.